DE LA ETIOLOGÍA DE ESTE BLOG

Hoy es un gran día para mi, no por que sea la primera vez que escribo, ni si quiera por la forma en la que lo hago, tampoco es la primera vez que participo de una forma tan directa en un blog. Lo especial de este día para mí, no es la creación de un blog, si no la creación de un medió para discutir no vagas ideas, ni aparentes pensamientos, si no la discusión de las formas de vida que hasta hoy ha practicado mayoritariamente el hombre.

Mi objetivo no es cambiar sistemas, ni estados, es de necios pensar que fuera posible que tan solo un hombre pudiera hacer semejante transformación. Mi objetivo simplemente se redunda a discutirlos, a aclarar sus  distintas naturalezas y motivaciones, compartir, debatir y enriquecer los pensamientos tanto de los semejantes como de los distantes a la universalidad en la que creo.  Entonces, a lo mejor mediante el mutuo y lógico convencimiento se consigan estados magnánimos que superpongan las necesidades sociales, naturales y humanas a la mera idiosincrasia del ser vanidoso y egoísta que antepone los intereses individuales a los colectivos.

Ante  la pregunta, de cual ha sido la motivación que ha propiciado mencionada creación, podría tener muchas respuestas, la incomprensión, la satisfacción de hacer esto, la mera necesidad de compartir mis ideas, el gusto por debatirlas, pero la verdadera y real motivación a hacer esto, la he tenido hoy en clase, veréis, hoy en mi primera hora de clase en la universidad, ha saltado un profesor convencido de la necesidad de que todos y cada uno de mis colegas, hiciésemos una pagina web propia con el fin de vender una marca personal, no ha sido su consejo o la dirección de este, el que me ha motivado a hacer esto, ha sido la pobreza que he podido plasmar en el alma y en las pupilas de cada uno de mis compañeros al poder sentir orgullo ante la necesidad de tener que vender sus vidas, y lo más paupérrimo de esto subyace en la forma aparente en la que lo hace la inmensa normalidad.

No creo que podáis convencerme a mí, pero sí, quizás al resto, de que se confunde, de que me confundo, de que eso no es así, o quizás no, quizás solo intentéis atravesar una pared de mármol, y estoy seguro que mucho de vosotros no lo haréis hasta que os rompáis los sesos y todo lo que a estos les rodean. Y no entendáis mal, no me tachéis como un mero egolatra, llamarme antes loco, necio, estúpido, por quizás poder tener todo a lo que vosotros aspiráis y aun así pretender renegarlos, incluso odiarlos y asqueado de estos, intentar trasmitírselos al resto, pero de verdad, hubo un tiempo en el que me corrompí, en el que me convencisteis, y después de que me haya vuelto a autoconvencer, después de que mi vida, mis experiencias y mis propias cualidades reflexivas me hayan enseñado el craso error de mi viejo y pasado comportamiento, no puedo ver ni un atisbo de estocadisticidad en que podáis modificarlo.

Quiero que sepáis, que me siento aquí como Sísifo y que veo a la mayoría de vosotros como Tántalos, pero que a pesar de ello disfruto de esto, disfruto tanto que hace unos meses he fundado una empresa con otros dos amigos bien experimentados en sus respectivas disciplinas científicas y aunque no compartamos la misma profundidad de mi filosofía, y que aunque no todas sus motivaciones sean económicas que cualquier individuo de este mundo vería como estrambóticas, las mías son las de poder demostrar que valoro más mi vida que un mero puñado de papeles que su único sentido es la esclavitud del propio individuo en un mundo al que cada vez le quedan menos días.

A pesar de todo, los admiro profundamente como hermanos, amigos y socios, y tampoco me equivocaría si dijera que verdaderamente nos asemejamos los unos a los otros. Al final los tres enamorados del trabajo humano, gastamos nuestro tiempo en un verdadero negocio, que aunque para mi sea otro negocio superfluo más, por lo menos entretiene el poco tiempo libre que nos queda.

Quiero que penséis, os abruméis y asustéis cuando de verdad, al igual que yo, veréis que las meras necesidades que de verdad el hombre requiere, son las que esta dichosa sociedad os quita, quiero que veáis que sois animales eternamente libres y que tenéis un sentido mayor que malgastar toda una vida gastando vuestro tiempo en tareas superfluas que no os llevan a ningún logro ni a ninguna riqueza, que la riqueza no se encuentra en los bienes materiales, que requieren competencia, pues son limitados e implican egoísmo, si no  en bienes intangibles, efímeros y mucho más complejos, apacibles y degustativos de conseguir y que requieren el compartir y la relación con vuestros semejantes.



ATACADME, PUES LO QUE ESPERO ES DEFENDERME.

"Las malas acciones no prosperan y  el dardo alcanza al ligero."

Homero